Stillness …
La magia de la vida se expresa a través del movimiento en cuyo corazón esta la Quietud. No es necesario que hagamos algún esfuerzo para encontrarla. Más bien se trata de soltar nuestra búsqueda o esfuerzo de alcanzarla, para que se revele en este espacio no condicionado por nuestra expectativa. Es aquel lugar donde estamos libres y podemos «ver lo que sea sin convertirse en ello» y desde cual podemos entrar en una práctica compartida con el otro sin ningún tipo de demanda, a veces — por primera vez en nuestras vidas. Solo desde este lugar proactivo dinámico del presente aquietado algo nuevo puede ser creado. Este estado nos da una oportunidad de ver y soltar nuestra dependencia o lucha con los hábitos y así poder Ver con una frescura absoluta aquello que siempre estaba allí…
El Trabajo es estar Presente en la Quietud, en este centro de nuestro verdadero yo, este espacio libre desde cual se despliega el milagro de la vida , este estado de ser donde uno simplemente es testigo de lo que está emergiendo sea cual sea la forma que esté tomando el proceso, sin juicios, sin expectativas, sin análisis .
El Trabajo es dejar que el « el Trabajo haga el trabajo», es confiar en la Inteligencia, rendir, al menos temporalmente, nuestras ganas y necesidad de arreglar al otro, de saber que está ocurriendo y de qué manera podríamos mejorar la situación.
El Trabajo es Escuchar tan plenamente como uno puede. Escuchar al otro y escuchar a uno mismo. Escuchar no desde el intelecto, no desde la dinámica masculina en la cual estamos estancados en casi todos aspectos de nuestras vidas. No escuchar para dar consejo, medicina, técnica o modelo terapéutico, sino desde corazón y sin ningún tipo de pretensión de cambio, esfuerzo de mejorar o curar algo. Escuchar y sostener incondicionalmente, sea cual sea el despliegue de la historia que se vierte ante nuestra presencia aquietada.
El Trabajo no es de acumular los conocimientos sino estar en la vanguardia dinámica de los avances de las ciencias más modernas que exploran las interacciones del cuerpo, mente y psique con el entorno, con el modo de vida que llevamos; las ciencias que están descubriendo un inmenso potencial del cambio y expansión expresiva contenidos en nuestras bases genéticas que nos permiten ser creadores de nuestra realidad en vez de ser víctimas de nuestro bagaje hereditario. La misma pasión nos mueve a todos, seamos un científicos o no — es la pasión por La Verdad.
El Trabajo es tener el coraje para sentirse inseguro, frágil, porque solo desde el lugar de esta máxima vulnerabilidad podemos explorar lo que somos más allá de lo que creemos ser. Es un viaje hacia « la tierra incógnita» y no podemos hacerlo pretendiendo seguir en la tierra firme y bien conocida.
El Trabajo es ver, reconocer, ser consciente del lugar desde donde vivimos, hablamos, tocamos, relacionamos con nosotros mismos y con la otra persona.
El Trabajo es « ser normal, ser tu mismo », sin intentar de convertirse en otra persona más inteligente, iluminada, serena, humilde, mejor o lo que sea.. Es trabajo es aún mas difícil a veces — es aceptarnos tal y como somos, compasivamente, abiertamente, delicadamente, conscientemente. No se trata de ser perfecto sino de estar «despierto».
El Trabajo es La Practica Compartida. Es compartirnos con los demás, compartir el Viaje, El Camino, momentos de dudas, momentos de la iluminación, risas y lágrimas. Es compartir lo que somos y como somos en cada momento. Es mostrarse.
El Trabajo es honrar a nuestros Maestros. Viven en nosotros. Nuestra relación con ellos es tan eterna como la propia Creación. Han encendido el fuego en nuestros corazones que nos mantiene de pie en los momentos de tormenta y nos hace volar entre los soles del Universo.
El Trabajo es El Compromiso. Es el Camino que se apodera de uno de una manera irrevocable. Nos elige y aceptamos ser Sus Peregrinos.
El Trabajo no puede ser nombrado, entendido o explicado. No podemos hacerlo, pero podemos encarnarlo convirtiéndose en el. No es Hacer sino Ser.
El Trabajo es Todopoderoso, Bello y Simple y sin embargo…te necesita.
El Trabajo vive en tu corazón.
Tu eres Su Centro